La ciudad más grande del sur de Italia, Nápoles, es famosa por su mezcla intoxicante del encanto del viejo mundo con el estilo moderno. Esta es una de las ciudades más antiguas de Europa, con suficiente arte, arquitectura y arqueología para compararse con otras ciudades metropolitanas. Pero es la pizza a la parrilla la que realmente atrae a las multitudes. El centro histórico de Nápoles (un sitio Patrimonio Mundial de la UNESCO) ofrece muchas atracciones entre cada parada a comer pizza: no te pierdas la Chiesa di San Gregorio Armeno, una obra maestra barroca del siglo XVI, y el Duomo, una catedral católica romana que comenzó a construirse en el siglo XIII. Mira objetos de Pompeya en el Museo Archeologico Nazionale di Napoli o deléitate con la gloria rococó del Museo Cappella Sansevero, construido a fines del siglo XVI. Termina el día como los lugareños, dando un paseo mientras se pone el sol sobre la Bahía de Nápoles.